Monitoreo de corrosión

Paradas imprevistas, limitaciones en el rendimiento operativo e impacto negativo en la condición de activos y equipos críticos convierten la corrosión y la erosión en algunos de los retos principales para las industrias de procesos de petróleo y gas.  

La ausencia de información del estado de sus activos imposibilita una asertiva toma de decisiones y genera un panorama poco alentador. Las razones principales que justifican el estudio de corrosión en la industria petrolera son: el impacto ambiental, la seguridad, la economía y la conservación e integridad. 

En las refinerías, adicional a la existencia de ácidos y bases, el calentamiento al que estas sustancias están expuestas o su solubilización, incrementan el potencial de corrosividad que ya es inherente a la naturaleza misma de los fluidos. Por ello es necesario identificar de forma prematura el estado de afectación y poder realizar así una previsión temporal de cuándo se producirán los daños visibles.

El principal problema que presenta la corrosión es que es un proceso natural inevitable, pero gracias a la transformación digital y al mantenimiento predictivo, usted puede monitorear la tendencia de medidas en pérdida de espesores, el crecimiento de grietas por corrosión o el cambio en las propiedades del material.

En la actualidad es posible calcular información valiosa como las tendencias de la velocidad de corrosión, los niveles de corrosividad de fluidos y otros datos diagnósticos de los activos a través de software especializado. Para esto, es necesario tener un sistema de medición apropiado para su proceso, que le permita recolectar los datos necesarios de manera efectiva, para realizar los cálculos. Además es importante que, basado en esa información interprete y tome las acciones pertinentes para mitigar los daños por corrosión y adelantarse a cualquier falla que pudiera ser causada por esto en el futuro. 

Un correcto sistema de medición permitirá: 

1. Incrementar la visibilidad: El monitoreo continuo de la corrosión en línea posibilita a los usuarios ver de forma remota las lecturas de la tasa de corrosión y las tendencias de la misma para mantenerse actualizados sobre las condiciones cambiantes del campo. 

2. Reducir riesgos potenciales: Se reduce el tiempo dedicado a la recopilación de datos, minimizando así el tiempo de residencia en áreas potencialmente peligrosas.

3. Aumentar la eficiencia: Mejorar el tiempo de respuesta para la mitigación requerida, luego de una rápida identificación de los cambios en el comportamiento corrosivo de los fluidos de proceso. 

4. Optimizar el uso de inhibidores de corrosión: Una correcta gestión de datos en la medición de corrosión propicia una mejor dosificación de estos agentes e impacta positivamente los costos asociados al consumo de aditivos.

En IYCSA, integramos nuestro conocimiento y experiencia con tecnologías de medición de corrosión y erosión no intrusiva, dentro de una herramienta escalable de análisis de gestión de datos, con el objetivo de obtener información operativa que impulse decisiones más efectivas acerca de los activos, los procesos y las mejoras en todo el sitio. Estas herramientas además, permiten movilidad, proporcionan alertas basadas en funciones y simplifican los flujos de trabajo para que la información correcta llegue a la persona adecuada en el momento oportuno.

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